miércoles, 17 de marzo de 2010

Cuando el cieno significa empeño


La historia de hoy comienza en un pequeño pueblo de Valladolid, llamado Castrillo del Duero. Este pueblo, tiene un arroyo, conocido como Botijas que estaba lleno de cieno verde de aguas en descomposición. A este cieno se le conoce en la zona como "pecina".

Como pasa en los pueblos, los habitantes tienen su apodo por los que se les conocen en otros pueblos, como "Especiales" a los de Algeciras o "Caballas" a los de Ceuta. Pues a los de Castrillo del Duero se les llamaban los "Empecinados" por el cieno y el olorcito que debía desprender el arroyuelo.

Pues uno de los habitantes del pueblo consiguió cambiar el significado de estar lleno de cieno por si mismo. Su nombre es Juan Martín Díez, campesino de profesión en un pueblo vecino hasta que llegaron los franceses en 1808. Entonces decidió combatir a los franceses y liderar una guerrilla compuesta por amigos y familia. Su cometido era fastidiar las comunicaciones francesas y a fe que lo consiguieron, porque lograron llegar a nombrar a un general francés (Joseph Leopold Hugo, curiosamente, el padre del posteriormente famoso Victor Hugo) como "perseguidor en exclusiva" de Juan.

Era conocido como todos los de su pueblo como el "Empecinado" y no se cansaba de lograr éxitos y molestar a los ejércitos franceses, creando incluso entre los franceses que "empecinado" fuera sinónimo de testarudo y empeño. Este significado de la palabra rápidamente se extendió a todo el lenguaje castellano.

Juan Martín Díaz combatió bien durante toda la Guerra de la Independencia y en 1814 a su final fue nombrado Mariscal (no está nada mal para un hombre de su condición campesina) y se le autorizó a firmar como "El Empecinado" oficialmente.

Así tenemos a un hombre que él solo fue capaz de cambiar el significado de una palabra.

domingo, 14 de marzo de 2010

Una nuez en el espacio


Hace algún tiempo escuché en mi programa de radio favorito un monográfico sobre un satélite de Saturno que como no podía ser de otra manera, tiene cabida en este blog.

El satélite es el octavo en orden de proximidad al planeta y se llama Japeto (de Iapetus, uno de los titanes.

El porqué está en este blog es porque la forma de Japeto es francamente extraña. Su tamaño es relativamente grande (el tercero en tamaño de los satélites saturnianos), con unos 1.500 km, pero hasta ahí no hay nada de particular.

Lo más curioso es que tiene forma de nuez. No es que sea un símil, es que efectivamente, en el ecuador tiene una cordillera que lo rodea completamente y en uno de los polos tiene una montaña muy similar al piquito de las nueces. Es la nuez del espacio, sin duda.

Pero no sólo acaban ahí las rarezas, la mitad del satélite es mucho más brillante que la otra mitad, y está compuesto de otro material. Es como un yin-yang. Aún se desconoce por qué, pero parece que acumula material proveniente de los anillos del planeta.

Fue descubierto por Cassini en 1671 y fue estudiado por la sonda Cassini en 2004 y 2007. Y como nota curiosa es que en la novela de ciencia ficción 2001: una odisea en el espacio, Japeto es donde se ubica el mayor monolito.

Pero hay una nota curiosa más. Esto es más un guiño a España que otra cosa. La cordillera central que rodea todo el satélite tiene un nombre muy conocido para nosotros. Se llaman los "Montes de Toledo". En la NASA también tiene humor español.

A veces mirar en el cielo te encuentras figuras demasiado cotidianas...

jueves, 11 de marzo de 2010

El origen de nuestra identidad


Si hay algo singular en el español es precisamente esa letra extraña que no existe en ningún otro idioma: nuestra Ñ.

El sonido no es un sonido único, pues en bastantes idiomas existe: en portugués es nh, en francés gn, en otros muchos es ny, etc. pero ningún idioma ha adoptado una letra propia para ese sonido.

Siempre me llamó la atención cuál sería el origen de la letra, pues es verdaderamente singular y un día, viendo una tumba en una iglesia en Burgos (escrita en castellano antiguo, utilizando múltiples abreviaturas para ahorrar espacio) vi un escrito que dio la pista de su origen. En este escrito había una palabra que tenía el fonema "an" y lo escribía como una a con una n pequeñita arriba. Igualmente había un gn (ignorar) y lo escribía como una g con una n pequeñita encima. Y pensé: ¿la ñ no será una n con una n pequeñita encima?

Efectivamente, el origen de esta letra es la duplicación de la n, porque en la grafía medieval se representaba la n detrás de una letra arriba en pequeñito. La única que ha conservado esta grafía propia ha sido la duplicación más común: la doble n, que existía en multitud de palabras latinas (annus, Hispannia). Poco a poco se impuso y ya estaba contemplada por Antonio de Nebrija en sus reglas ortográficas, hasta hoy.

Posteriormente hay palabras que han tenido la grafía de la doble n, pero la han mantenido, sin derivar a la ñ, como "innovación", que hubiera sido "iñovación" si hubiera existido en la edad media. La verdad es que hasta suena parecido.

Incluso ha habido idiomas que la han adoptado como suya (gallego, euskera, filipino), para representar el mismo sonido.

Como no podía ser de otra manera, nuestra identidad mayor proviene de los monjes medievales dispuestos a economizar espacio a toda costa...

lunes, 8 de marzo de 2010

Un desierto para quedarse ciego


Este post viene a petición de mi hermana Palma. Ella había oído de un desierto que requería de gafas para adentrarse en él y me lo comentó para que lo publicara.

Indagando, lo he localizado. Se llama Salar de Uyuni o de Tunupa y es con casi 11.000 Km2 el mayor desierto de sal del mundo.

Sí, es un desierto de sal, lo que provoca una reflexión de la luz muy agresiva para la vista y requiere de protección.

El origen de esta enorme extensión de sal es un lago prehistórico llamado Lago Balliván, que se cree se secó hace unos 40.000 años. Su desaparición ha creado una extensión del tamaño de la provincia de Sevilla, con un total de unas 10.000 millones de toneladas de sal.

Tiene una profundidad de sal de 120 metros y unas 12 capas diferentes, desde salmuera hasta barro lacustre.

Sin embargo su mayor curiosidad es su altura. Se encuentra a 3.650 metros de altitud (más alto que el pico Mulhacén), en Bolivia. Hay que indicar que Bolivia es habitual en records de altura, pues su capital, La Paz está situada también a esa altura, siendo la más alta del mundo.

Dentro del desierto se encuentran algunas islas, que ya debieron serlo cuando existía el lago prehistorico, siendo la principal la que llaman isla del Pescado. Estas islas, no habitadas, alberga unos cactus gigantes, de 10 metros de altura, dignos de ser visitados.

Eso sí, si se visita, no olvidéis llevaros gafas de sol, para no quedarse ciego.

sábado, 6 de marzo de 2010

Yo nací el 13 de octubre de 1582... ¡¡Mentiroso!!


Este post arranca cuando Santi apareció por este mundo. Nació el 15 de Octubre y como no podría ser de otra manera, busqué algo sobre ese día.

Lo primero que salió fue el Santoral: Santa Teresa de Ávila (o de Jesús), santa bastante conocida que además tiene una curiosidad con las fechas muy propia de este blog. Santa Teresa murió el 4 de Octubre y fue enterrada 24 horas después, el 15 de octubre de 1582.

Pues sí, precisamente ese día (4 de Octubre) fue adoptado el calendario gregoriano en España, Portugal, la parte católica de Polonia e Italia. Ese calendario (posteriormente adoptado por casi todas las naciones europeas) vino a corregir el desfase que se había producido por errores de cálculo del calendario juliano y había adelantado el inicio litúrgico de la Pascua que se celebraba el equinoccio de primavera. Aquel año, con el desfase acumulado desde que se instauró el calendario juliano, se produjo el 11 de marzo, 10 días antes de lo que decía el calendario y hubo que corregirlo suprimiendo 10 días del calendario: precisamente del 5 al 14 de octubre de 1582.

Esta reforma conlleva una segunda curiosidad. Los años bisiestos se producen cada 4 años, pero no todos. Recuerdo que mi madre, en alguna clase de ciencias en EGB comentó que eran cada 4 años, salvo aquellos que acaban en doble cero. Casi.

Los años bisiestos según la bula Inter Gravissimas (en la que el papa Gregorio XIII instaura el nuevo calendario) serán aquellos años divisibles por cuatro, que no sean divisibles por 100, salvo aquellos cuyas primeras dos cifras también sean divisibles por cuatro. Me explico: por norma general cada cuatro años, hay un bisiesto, pero los que acaban en doble cero (1900, 1800, 1700) no lo son. Sin embargo, sí lo son los que acabando en doble cero, las dos primeras cifras sí son divisibles por 4 (1600, 2000).

Con esto se consigue ajustar exactamente el año terrestre: 365,2421 días. Aún así hay un pequeño desfase que obligaría a cuadrar un día cada 3300 años, pero eso es demasiado tiempo para que se note.

Vamos que si veis que alguien dice que nació el 13 de octubre de 1582, podéis llamarlo mentiroso, directamente.

jueves, 4 de marzo de 2010

Cuestión de Olivenza


La historia de hoy comienza en 2003, cuando la CIA en su informe anual de conflictos internacionales de soberanía incluye, junto a Gibraltar, Gaza, El Sáhara, Kachemira y otras a una pequeña población de Badajoz, llamada Olivenza.

Esta población está situada a unos 25 Km al sur de Badajoz y tiene unos 12.000 habitantes. En ese momento le pregunté a un amigo y maestro del trabajo, natural de la zona, y me comentó que efectivamente a los de Olivenza los llamaban coloquialmente "los portugueses".

Investigando, Olivenza fue portuguesa desde 1297 hasta 1667 y desde 1688 hasta 1801 cuando se produjo una refriega en la zona en el contexto napoleónico de la época.

Esa refriega, conocida como la Guerra de las Naranjas se produjo precisamente en ese año (1801) y se cerró con el Tratado de Badajoz, en el que Portugal se obligaba a cerrar sus puertos a los ingleses y a cambio España devolvía las villas conquistadas en esa guerra, salvo Olivenza.

Sin embargo, en el tratado de Viena (1815) en el que se fijaban los territorios de Europa tras la derrota de Napoleón, en su punto 105 se dice "se recomendará eficazmente a España que restituya a Portugal la plaza de Olivenza y algunos territorios".

Esta recomendación nunca se llevó a efecto y Portugal nunca la ha reconocido como española. De hecho, ha seguido manteniendo su reclamación, conocida como la "Cuestión de Olivenza", aunque la ha reconocido como española de forma tácita con la firma en 1977 de un tratado de amistad en el que se reconocen "la inviolabilidad de las fronteras de ambos países".

Hoy en día, con la Unión Europea no tiene sentido tal reivindicación, y el propio ministro de asuntos exteriores luso consideró en 2003 que la Cuestión de Olivenza estaba "congelada". Pero siempre quedará el dato curioso de una villa de Badajoz jamás reconocida por el país vecino.

martes, 2 de marzo de 2010

Las ingenieras de la naturaleza


Cuando se habla de un panal de abejas, a todo el mundo le viene la imagen de un montón de celditas hexagonales juntas unas con otras.

Es muy curioso la imagen, pero ¿por qué las abejas utilizan esa forma geométrica tan compleja? La respuesta tiene su lógica, aunque no lo parezca.

Sólo hay tres formas geométricas regulares que permiten rellenar un plano sin dejar ningún resquicio. Son aquellas que tienen un angulo interior múltiplo del ángulo exterior: triángulo (interior 60º, exterior 300º), cuadrado (interior 90º, exterior 270º) y hexágono (interior 120º, exterior 240º). El resto de figuras siempre dejan un trozo entre unas y otras (os invito a hacer la prueba).

De las tres, evidentemente, la más compleja es el hexágono, pero es la elegida. La explicación es la siguiente: es la que menos cera para su construcción necesita.

Me explico: la cera necesaria sería la medida del perímetro de la figura. Para un área cualquiera (por ejemplo, 1 m2), el triángulo tendría un perímetro de 4,55 m, el cuadrado de 4 m y el hexágono de 3,72 m.

El elegir la figura hexagonal les permite ahorrar ¡hasta casi un 10% de cera en cada panal!. Para que luego no digan que no son las ingenieras de la naturaleza.

Si además supiéramos cómo se hace la miel...

Edición 10/03/2010:

Tras el comentario recibido, efectivamente Nature publicó un estudio que indicaba que las abejas realizaban los panales de forme cilíndrica, más fáciles de construir y que es la presión lo que hacía que fueran hexagonales. Sólo añadir que el hecho que se vuelvan hexagonales, no es producto del azar, pues requiere una disposición en el plano de los cilindros muy concreta. Por ejemplo, si los círculos estuvieran contiguos, el resultado sería una serie de cuadrados, no hexágonos. Hacerlo circulares y presionarlos para que se vuelvan hexágonos es más un método constructivo que otra cosa, porque al final, por la forma que tienen de hacerlo, sale lo que tiene que salir. Ingenieras hasta para contruirlos.